miércoles, 14 de septiembre de 2016

El hambre de Cupido


Ya sabes
que siempre estuve cómoda entre escombros.
Que nunca me molestó estar rodeada de cascotes,
ni mancharme la cara de polvo.
Que el ruido de las explosiones era el cantar de los pájaros
y que las sirenas en las calles
eran la banda sonora de esta historia.

Cada día, y sobretodo, cada noche
suponía un nuevo derrumbamiento.
Soy una mujer en ruinas,
dispuesta a matarme un poco más.
Elige por mi un barrio de Madrid
para hacerlo esta noche.
Ayúdame a tensar la cuerda,
que cada uno tire de un extremo;
a ver si hoy se rompe.

Me he dado cuenta de que todo el dinero que gano
lo invierto en tabaco y alcohol.
He pensado en decirte que te quiero,
pero no puedo.
He necesitado el cariño de un abrazo
y un hombro inundado por mis pestañas rotas.
Pero el tiempo es una barrera de almas frágiles.

Ya no siento el hambre de Cupido.


Progresivo, y nunca para


jueves, 21 de julio de 2016

Romance en negativo y magia nocturna


Se me olvidó
que no iba a verte más.
Y no me acordé
cuando me hacías fotos
mientras fumaba en tu ventana
    desnuda.
Y cuando utilizaste mi vientre y mis senos
como lienzo improvisado.
En la radio sonaba música francesa
y tu me mirabas el sexo
como si fuera el lugar perfecto
desde el que contar secretos al mundo.

El sol y las ganas
calentaron mi piel,
sobreexpuesta en el objetivo
húmeda, bajo el pincel y la tinta.
Algún día solo será un rollo de negativos más.
Y tú para mi,
el recuerdo de unas manos ágiles
con la cámara y los pinceles,
como mínimo.

Pero decidí no recordar las razones
por las que no iba a verte más.
Y sustituirlas por las que argumentan
los besos bajo el agua de la ducha,
las frambuesas con trufa de mi boca
o tu forma de devorarme por dentro.

Me da igual lo que dijeran los mayas
y sus estrellas.
Tú y yo,
somos los magos de esta noche.


Magia nocturna

Veranos de asfalto


Que el puto invierno se acabó.
Dejad de quejaros
y quitaos las pieles y el abrigo.
Vamos a desnudarnos
y a sonreír y a comernos el alma.
Que el sol ya quemó las flores
de la primavera pasada,
y es hora de ponernos bajo su sombra.
Comprendedlo.
Vuestros males son los de todos
y no son ninguno.
Dejad de quejaros.
Vamos a brindar en una playa de sueños
y a zambullirnos desnudos
aunque sea en este mar de asfalto
que es Madrid.
Pero sin llantos,
ni más lloros.
No estáis peor que el resto.
Dejad de quejaros
y vamos a bebernos el calor de un buen vino,
y de besos en la boca.

A ver si de repetirlo
me aplico este cuento,
que en realidad es un 'por favor'.


Vuelve a amanecer

La importancia de las hojas caídas


A mis primos por su boda.



Juntos en cada florecer
y durante la primavera
pero también en las rosas deshojadas
y en las hojas caídas,
esperando el brotar de cada nueva semilla
entre la hojarasca.


"La importancia de las hojas caídas"
Óleo, tinta y pan de oro sobre lienzo
54x65cm

Paula conmigo misma


Qué bonito es verte amar
y mirarte sin rencor.
Qué bonito será abrazarnos
como nunca imaginé.

Cómo nunca imaginé
lo placentero que sería perdonar,
ni cómo el tiempo
filtró los recuerdos en mi boca,
que ahora paladeo en color rosa
y tienen ese regusto dulzón.

Sonreír con la felicidad
de un ser amado,
en un tiempo verbal imperfecto.
Regodeo en una alegría
que no podría ser la mía
pero sí es la suya.

Qué bonito es olvidar las hieles.
Tú me llamaste apicultora de utopías y locuras,
cuando esta es la miel
con más cordura que he probado.

Qué bonito es amar
y haberte amado.


Yo conmigo misma.

jueves, 30 de junio de 2016

33 Vidas Numeradas


Fueron 33 las veces que me pusieron
un cubo de rubik en las manos
y mirando a mis ojos de niña,
me retaron a completarlo.
Así aprendí a barajar los colores
y darle vueltas a sus piezas
de sociedad cuadriculada.

Fueron 33 las veces que me pusieron
una aguja en la mano derecha,
me arrancaron los botones sueltos,
tiraron de cada dobladillo mal remendado
y me animaron a repetir y mejorar.

Fueron 33 las veces que me dispararon disparates
y falsas ideas.
Y fue la 34 cuando me levanté
dispuesta a pasear al despacho del director
la 35, la 36 y las que hiciera falta.

Soy de letras pero cuantifico mi vida en números,
como todos.
Y solo hay una razón
por la que al volver a casa andando de madrugada
levante tanto la cabeza
al oíros decir "¿A dónde vas tan sola?"
Y es que un día seremos tantas
que no habrá piropos para todas.
Seremos tantas que no tendremos miedo.
Seremos tantas que nadie dirá nada,
y si alguien se atreve,
seremos tantas,
que en lugar de esta prudencia incoherente,
no solo levantaré la cabeza,
sino que me daré media vuelta para decir:
"A donde me da la puta gana, gilipollas"

Vivimos la vida en números que suman
y nombres que restan...
Pero es que un día seremos tantas
que no nos podrán contar.

PERO ES QUE UN DÍA SEREMOS TANTAS QUE.

Calle San Andrés una noche cualquiera, una chica cualquiera.


Fotografía de Andrés Palacios

sábado, 11 de junio de 2016

Seres autocombustibles


Este es el fenómeno de la fruta prohibida.
Dime de qué manzana no quieres que coma,
que saltaré todos los gusanos,
reptaré todos los matojos de mi conciencia
y escalaré las cimas de los árboles más altos,
subiéndome sus copas
y algún chupito de tequila.

No se cómo lo hicimos,
no hubo presentación, ni fraude.
Pero acabamos volviéndonos locos cada noche,
y descubriendo cómo 'pensar antes de actuar'
era solo un símbolo de cobardía.

Que tendrá esta noche en Malasaña.
Será el bourbon
o la amnesia,
que nos hace portarnos mal,
o subir en ascensor al cielo,
o perdernos en un bosque
para recoger las mejores piñas
con las que encender la chimenea,
y calentarnos hasta ardernos
e incendiar las sábanas y las calles
y que el fuego acabe con todo.
Con cualquier pensamiento inoportuno.
Con cualquier preocupación estúpida.

Qué suerte que seamos imposibles e inflamables,
y que los hilos que nos tensan
se aflojen o se vuelvan tirantes al placer,
siempre que nosotros queramos.
Y qué suerte que la fuerza de cada mirada
se volviera terriblemente vertiginosa,
para darnos cuenta de que seguíamos las mismas reglas,
dictadas por mis manos en tu espalda
y las tuyas en mi cuello,
con la única directriz de seguirnos bebiendo
para acabar preguntándonos: "¿Y qué?"

¿Y qué?
¿Y qué? Si mi sangre entremezclándose con tu semen
era una de las cosas más bonitas que había visto nunca.


Combustiones externas

El umbral del dolor


Júbilo, alboroto, algazara, gozo,
zaragata, regocijo, felicidad, tu sonrisa.

Esparcimiento, entusiasmo, regodeo,
hilaridad, alegría, diversión,
la carcajada de un niño.

Satisfacción, contento, entretenimiento,
una mirada de ilusión, las flores,
pero sobretodo, las hojas caídas.

La brisa del mar, la lluvia en verano,
el recuerdo de un beso, las abuelas.
Los poemas bonitos,
el movimiento de los columpios
o las cervezas frías.
Llenarte el estómago,
hundirte bajo las sábanas,
entrar en calor.
Las buenas historias y los paseos largos.
Nacer en Europa y las banalidades.


Esta vida.

Seguro que va a doler.
Son sólo formas de verlo.


(Aarhus, Dinamarca)

martes, 31 de mayo de 2016

Suciedad concreta, o historias que no se pueden contar.


Suciedad concreta 

En las aceras de Malasaña
proliferan las historias
que son la vida de la ciudad.
Y son lo más desagradable
y son lo más bonito.

Son el escondite de las lágrimas de un hombre
o los restos de gramíneas de la nariz de otro.
La primera cerveza del etílico nocturno
o la última, antes de ser multado por sorpresa
entre la risa y la mierda.
Colillas con carmín,
el resto de una mora,
los nervios acentuados al tratarlos de apagar.
Miles de hojas caídas y personas que se levantan.
Nuestra cruz de ciudadanos del primer mundo.

¿Suciedad ajena o historias que no se pueden contar?

lunes, 16 de mayo de 2016

Abrazos triangulares


No sé si sé lo que es la justicia.
No sé si se puede definir justicia.
Puedo creer que algo es justo o no.
Puedo pensar incluso en lo que es, para mi,
el punto medio entre lo uno y lo otro.
Y desde esa creencia subjetiva,
puedo atreverme a decir
que un amigo,
a veces es aquel
que se pasa la justicia por el forro de los cojones.
En honor a la amistad.
Por eso no te voy a exigir nada.
Ni siquiera voy a romper los vasos vacíos.
Porque no sería justo.
Pero es que a veces los amigos
deben estar dispuestos a hacer cosas que no son justas,
para estar orgullosos de serlo.
Y por eso hoy, quiero un gran abrazo.
Triangular.
Cálido y fuerte.

Porque quiero ser justa.
Porque quiero ser leal.
Porque quiero ser amiga.

26 de Junio


Esto, me esta quemando.
Los derechos se tienen o no se tienen.
Ejercerlos o no, poco tiene que ver con tenerlos.
Y mucho menos, con convertirse en una restricción
de la libertad de opinión.

Os contaré una historia sin apellidos.
Sin detalles laterales.
A la abuela Enriqueta,
la obligaron a llorar por las calles,
a punta de pistola en la sien,
con la escusa de encontrar algún cochino
escondido en un desván.
Y al tío Delfino, al que todos llamaban Pin.
le fue perdonada la vida, de rodillas,
al final de una larga fila de compañeros,
gracias a ser joven y estar aprendiendo.
O por desgracia. Nunca lo tendrá claro.
El caso es
que da igual de donde fueran y que pensaran.
Da igual los nombres de los verdugos y de las victimas.
Sus nombres son los de todos.
Sus nombres son los de nadie.

Me esta quemando.
Pero es que tiene que quemar.
No se qué son peor,
si los malos que te esperas que sean malos,
o los malos que te esperas que sean buenos.
Todos, siempre son peores.
Por eso es mejor recordar las historias sin títulos,
sin ideologías, ni lados del muro.
Porque da iguaaaaaal.
Porque el rencor solo trae más odio.
Y no necesitamos más odio,
ni más ladrones, que ya son muchos.

Si alguien quiere tomarse una cerveza
y brindar por la humildad y sus militantes...
Yo el 26 de Junio, lo tengo libre todo el día.


Os muestro mis ojos, para que oigáis mi voz. 


jueves, 12 de mayo de 2016

Promesas con garantía


Solo te puedo prometer una cosa.
Haré lo que me apetezca.
Pero que hoy, me apeteces tú.
Y es real y es sincero,
como que la manecilla del segundero de ese reloj,
va a seguir avanzando en un bucle infinito.
Te puedo prometer que nunca me oirás decir
"Hazme tuya"
porque nunca lo seré,
como que pertenezco a esta tierra
que me hace emerger los días.
y que no me oirás romperte el cielo y la Luna.
Pero que te puedo prometer esta noche.

A lo tonto, ya llevas tres promesas,
y no una.
Y lo que realmente tienes que entender,
es que por muy fugaz que te parezca
esta es una declaración de amor,
como que el sol va a salir mañana
y que vendrá la primavera a jodernos con sus flores.


A veces son bonitas las jodidas.

Estudios de los sentimientos tristes


El llanto de los vasos vacíos


Desde dentro de sus ojos cristalinos
observó mi rostro,
cubriendo tan sólo una parte
con su pequeña manita.
Desde dentro de sus ojos transparentes
dirigió una pregunta a los míos,
mientras señalaba las cicatrices
que atraviesan mi frente.
"¿Te duele?"
He contestado que no,
que las heridas curan
y las brechas se cierran.
Porque no quiero que le tenga miedo a caerse.

Solo cuando ellos, sin ojos, dicen
"¿Aún duele?"
penetra su pregunta en los míos,
de ennegrecidas pupilas por el humo.
Acariciando con su piel lija
cada músculo y ventrículo.

Joder.

La pregunta es:
"¿Cómo no va a doler?"
¿Cómo no va a doler?
La ausencia de un líquido del que fui recipiente.
Fluir que habitaba
donde ahora, rozan tus manos de escofina sin dientes.
¿Cómo no va a doler su ausencia?
Si sus efectos aún perduran en mí.


En realidad no es una metáfora de la regla, oye, pero podría.


Los vasos llenos de sus lágrimas


Dios, hoy he visto las escaleras mecánicas
y me he visto rodando hasta el fondo.
Hasta que mi pelo se enganchara
con los dientes hambrientos de su sino.
Tras tres volteretas involuntarias,
que acabasen en mi cráneo despeñado.
Por todas las acciones estúpidas que comete.
Estúpidas.
O no.
Pero joder,
me han preguntado que si le echo de menos.
Pero la pregunta es:
"¿Cómo cojones no iba a echarle de menos?"
Perdón por las palabrotas.
Y por las decisiones,
que no puedo evitar tomar.


lunes, 2 de mayo de 2016

Reflexiones belgas para una misma


Es ciudad de casas alegres
y suelos tristes.
Lágrimas de empedrados,
gotas de grava en el asfalto
y gente lista y ordenada.
Coches limpios y nuevos.
Nadie hace poesía en los parabrisas,
de lo burdo y la suciedad ajena
escribiendo 'GUARRO' con la risa.
Las calles están tan inmaculadas
que los edificios dejan la basura en sus orillas.
Porque no existen los cubos de basura,
donde firmar con permanente negro.
Tampoco hay mucha gente
con permanentes negros.
Muy bonito el gótico, sí.
Y las columnas doradas
que dicen salomónicas.
Todo el esplendor
plantado sobre la inmundicia,
como el estiércol del que brotar.
Regado con sus leyes,

Van a trabajar a un lugar triste
en forma de cruz latina,
tan inmenso y sólido,
como tambaleante y feo.
Como diciendo:
     Aquí estamos.
     Gobernando.
     Admiradnos.
     Respetadnos. 
     Agradecédnoslo.
     Temednos, también.
     Somos el telón de acero
     de la Rue la Loi.
Los cisnes se limpian las plumas
a pocos metros del parlamento,
y su única preocupación es
ser hermosos
y comer.

Pero, domingo.
12:30 del mediodía.
Un vendaval de banderas multicolor
invade la Estación Central.
Proclaman la paz a ritmo de tambores.
Mientras, las flores se marchitan en la puerta del metro
y hombres camuflados aún vigilan los aeropuertos.

Se puede leer en una pancarta:
"Si la guerra es la respuesta,
estamos haciéndonos la pregunta incorrecta"





Mas fotos reflexivas belgas aquí:
https://flic.kr/s/aHskvSDqqf

Reflexiones belgas para exigentes


Joder, dime tú entonces, qué es poesía.
Dime tú quién eres para cuantificarla,
ponerle un precio
y someterla a las leyes de mercado.
Porque sí, 'poesía' está en la columna de Top Ventas del Corte Inglés,
pero 'poesía' está también en los rincones más sucios de la calle.
'Poesía' son los pelitos negros que le salen a las cebollas
cuando se pudren en la nevera.
            Si yo quiero.
'Poesía' eres tú y yo y todos nosotros.
Es este instante, ahora mismo. ¡Ya!
'Poesía' es feminismo, es expresión.
Es un gobierno de mierda, incluso.
Es amor y aunque nos joda,
es todas las metáforas de alas
y del volar, el viento y los pájaros.
Sí, también son 'poesía'.

La poesía es una cuadrícula perfecta,
matemática.
Y de repente, libre, surrealista.
¡Esto no es una poesía!
¡LA POESÍA ES UNA PIPA!


"La poésie est une pipe"
René Magritte

Attempting the Impossible (1928) René Magritte

martes, 19 de abril de 2016

TCHSSSSSSSSSSSSS


A veces me pasa que oigo ruido en mi cabeza
y cada movimiento por lento que sea, suena brusco.
Hasta el batir de este bolígrafo arriba y abajo, es agresivo.
El traqueteo de la rueda del ratón
es como una serie continuada de golpes violentos,
que ni sabes de dónde vienen, ni sabes a dónde van
pero que los tienes que escuchar y no
                                                          puedes
                                                                 escapar.
Y cualquier canción que pongas,
por muy alto que lo hagas o por muy alegra que sea,
se va a convertir en una melodía sórdida y sanguinaria.
La sensación constante es como si algo fuese a pasar
y solo tú pudieras saberlo,
porque tu alrededor está en una perfecta, y llana, y silenciosa
                                                                                           calma.
Se va a cometer un crimen horrible,
y tu sola respiración relajada te lo está indicando
porque de repente te suena alterada,
                    ¡Y NO LO ESTÁ!
Y parece que alcanzas a escuchar los gritos de fondo
como un patio de recreo,
o una cámara de gas, pero no,
                                            se oye,
                                                     nada.
Estos sonidos imaginarios violentan mis pensamientos
en las noche más cerradas a solas en mi cuarto,
a veces en una biblioteca, o en la sala de espera de un hospital,
o incluso, en la discoteca más ruidosa...
Y tiene tal incoherencia, que te vuelves loca
o te distraes escribiéndolo cuando no tienes papel
o no tienes lápiz, o no tienes batería,
e imaginas que lo escribes o imaginas que te apagas
y tu cabeza deja de sonar como la caja
                                                       de música
                                                                   rota
                                                                       que eres.


Dragones o murallas de espino

domingo, 17 de abril de 2016

La forma no correcta de pedir perdón


Lo siento, mamá.
He profanado
y maltratado
este cuerpo
como siempre me pediste
que no hiciera.

Lo siento, papá.
No soy abogada,
ni estudio derecho
ni me interesa una mierda
la política y el comercio.
¡Me gusta pintar!
¡Esculpir, dibujar, escribir!...
Y ojalá lo pudieras apreciar.

Lo siento mucho, abuela.
Pero no,
no soy virgen,
ni me veras ir a confesar,
ni vestir de blanco,
¡Ni dar a tres niños de mamar!

Lo siento mucho, abuelo.
Te mentí.
No vote al PP.
Y no,
no lo voy a lamentar.
Espero que me puedas querer igual.

Y por eso,
y aún así,
hoy grito:

"Querida 'yo misma',
Oh, mujer cambiante
de gustos infinitos
y sed inagotable.

Casi no te conozco,
pero, ¡A la mierda!, lo voy a decir:
Te quiero."

jueves, 14 de abril de 2016

Epigastrio plano


Tengo el estómago vacío
de vísceras con las que hablar,
y una cabeza llena de paja,
para no pensarte.

Las extremidades atontadas,
despistadas,
al no encontrar el tacto ya memorizado.

Y un mar muerto en mis pupilas
flotando sobre hondas ojeras
regadas con agua salada,
       un vez,
       tras otra.

Y tengo las venas atascadas de retenciones
y la boca yerma,
por los cigarrillos que ya no me sacian.

Siente el fuego
que te invade por la rabia.
Acoge la llama en tu fuero.

Olvida cada batir de pestañas
y cada muñeca rodeada por la extensión de otra.

Escucha el ardor que resbala las mejillas,
abriendo surcos.
Son caminos.

Empezar a andar...



Lágrimas de sauce

miércoles, 13 de abril de 2016

Estados y pieles


Soy la sangre que se desliza por mis piernas
abrazando el agua hirviendo,
desapareciendo hasta llegar al sumidero.

Soy el asfalto bajo las ruedas de sus furgones.
Hinchándose y contrayéndose
cada noche, cada día, en cada estación.

Soy el vapor de mis espagueti ecológicos
parduzco integral,
que se pega en mis cristales
implorando libertad.

Soy el beso en los labios de dos amigos
que juntan sus rastas
para proclamar la tontería.

Soy la espuma del mar,
sin ser metáfora romántica.
Parte salada, parte petróleo,
porción de orina y heces
y un pedazo de símiles de liberación cuando amanece.

Soy una tecla golpeada hasta la saciedad,
firmando textos
que nunca dicen lo que quiere.

Soy el escupitajo del mendigo,
olvidado,
como él,
sobre la acera.

Soy la madera de una puerta
que soportan los cansados hombros y las lágrimas
de una anciana,
impidiendo que se abra
tras la gente gris.

Soy el agua sucia del cubo de fregar
400m² a 6000 el metro,
por un rostro ajado y sin sueños ya,
más que unas bocas
y sus estómagos llenos.

Soy el semen sobre su tripa,
tras aceptar cobrar un poco más
por un encargo especial.

Soy cada golpe contra la puerta
y cada caída por las escaleras.
Pero también cada piropo,
cada chiste rancio,
cada copa gratis.

Soy cada frontera cerrada
y cada girón de tela enganchado
en su alambrada de espino.

Soy cada mentira que te crees
viniendo de sus bocas, tan sucias...
como la leche agria que han mamado
para corromperse así.

Soy las caricias de unas manos arrugadas
de una abuela a su nieto,
tras darle la merienda y mandarle a jugar,
para no ver lo que sus callos ocultan.

.
..
...


Soy todas las cosas que se me ocurren
y mil más con solo pensarlas

Hoy siento estas cosas,
pero mañana...
quizás si,
quizás no...
Pero no las soy.
Ahora soy una pregunta,
que mi madre dice debería darme igual:
¿Por qué la empatía no es una cualidad innata?



Cabeza desagüe, vestido sangrante.

jueves, 31 de marzo de 2016

El cuento/gota de cada día.


Tantos años escuchando la misma historia.
Su misma historia.
Y son tan pocos.

El repiqueteo constante sobre la sien
y la presión.
La presión...
La presión, la presión, la presión.
¿La sientes?
Es el cuento del pájaro carpintero y el tejo.
Es la crónica del hacha de guerra mellada
cada día por la misma brecha.
Son los anales de la gota de agua que golpea
cada noche
la piedra húmeda.
Hasta su escoriación...
Y la presión...
La presión, la presión, la presión.
Arrostraré tus picaduras.
Soportaré tus golpes.
Acogeré la precipitación de tu orvallo sobre mi seno
y permitiré que me perfore.
Desde dentro hacia fuera...
hasta que no quede de mi un ápice de carne,
ni una chispa de ánima.

Y la presión...
La presión, la presión, la presión.
Carcomerá la albura de este leño
y asaltará el duramen corazón.
Oxidará por picadura el acero de mi arma
hasta ver su filo engranado.
Erosionará la roca pétrea y porfiada,
hasta legarle el pulido espejo
que solo conceden agua y tiempo.

Y la presión...
Aunque cese ya su germen,
causante de mi deslustre,
habrá dejado a su visita:
La galería del xilófago en mi madera.
La herrumbre sobre el metal mordido.
Y la tina vetusta
sobre la tez mineral que me tapiza.


Diástole herrumbre - Gijón

domingo, 27 de marzo de 2016

Orlín #DíaMundialDeLaPoesía


No son los mejores poetas, ni siquiera son exactamente mis poetas favoritos.
Son personas que me han ayudado, me han inspirado, a las que admiro, a las que respeto...
De las que me acordé el Día de la Poesía y a las que se lo he querido agradecer de esta forma:





Fila superior: Constantino Kavafis, Lope de Vega, Rubén Darío, Walt Whitman, Charles Bukowski, Silvia Plath, Frida Kahlo, Concha Méndez, Ernestina de Champurcin.
Filas inferiores: Escandar Algeet, Irene X, Noelia Morgana, Carlos Salem, Pepe Ramos, Luis Larraya, Diego Skanderberg, Sara Zapata, Luna Miguel, Carlos Guerrero, Miriam Martins, Ana Palaniuk, Jorge Valverde, Carlos Alfaro, Miriam Salgado, Noe de Blas, Luna Contreras, Nacho Grata.


Y perdón por el retraso, el Día de la Poesía fue el 21 de Marzo.

miércoles, 23 de marzo de 2016

HASTA EL COÑO (parte 2)


Releyendo 'Hasta el coño' me he dado cuenta de que ¡Ya me vale!, ¿Escribir un poema de corte feminista dirigido solo a mujeres? ¡Anda qué no hay buen material en la producción masculina para criticar! En esta segunda parte, vuelve el ataque rancio, vulgar y soez de la primera, dedicado ahora a ELLOS, nunca con intención de ofender a nadie y siempre con la de provocar todo lo posible. La pregunta ahora es: ¿Se convertirá 'Hasta el coño' en una serie?



No puedo escuchar más
audiopoemas de hombres
idolatrándose de esa forma.

Por favor, parad.

No me vengáis de feministas encima
si en vuestros poemas siempre soltáis
la misma mierda.

Como ya he dicho,
estoy hasta el coño
de que habléis de nuestra piel suave
y de las curvas de mi pelo que...
BAH! sabéis que habláis de nuestras tetas,
no engañáis a nadie.

No quiero volver a escuchar más
de cómo se movía su vestido al pasar
ni de su grácil caminar...
que si ella era perfecta
y era preciosa...
ni de cómo os perteneció
y mucho menos de como cambiasteis su mundo
y su vida, y su alma, y su corazón!

No quiero volver a oír
que me comparas con comida rápida
o con la ropa barata que hay tirada en el suelo
de las tiendas en rebajas.
No quiero volver a oír
que tu chica perfecta era la nouvelle cuisine,
ni la prenda por la que tienes que preguntar para conseguir ver.

Y sobre todo,
dejad de fomentar el amor romántico
porque, ¡Venga!, no te lo crees ni tú...

POR FAVOR, PARAD.

Yo estoy muy orgullosa de tirarme pedos
Así que, apunta:

PUEDO SER DE TODO, 
MENOS TU FLORECILLA DELICADA, CAPULLO.



Nebulosa morada

Deja de lloriquear bajo tu paraguas


¿Cuántas mierdas has pisado con esas botas?
¿Cuántos adoquines has ahogado bajo sus suelas?
... Mientras buscabas un camino por el que andar.

¿Cuánto de esto te pertenece?
Y cuándo te vas a dar cuenta de que la respuesta es nada.

¿Por qué son ya las dos de la mañana?
Y yo me acabo de enterar
¿Cuándo ha pasado el tiempo?
Y tú ni lo has notado.

Quiero sentarme en este suelo
y abrazarme las rodillas,
y moverme,
Adelante,
y para atrás.
Adelante,
y para atrás.
Mientras intento llorar
para poder quejarme
de lo que me ha dado esta vida,
que no es ni media razón para quejarse.

Adelante
y para atrás.
Recordando todas las cosas que me han pasado
y que me han hecho ser quien soy
a base de hostias, que no son ni media hostia
comparadas con las que han sufrido los demás.

Problemas del primer mundo.
¡Qué fácil es lamentarse!
...desde este sofá y bajo este techo.

Crónica de fango y hielo metáfora


Tentemos a la suerte


Mira que se me ocurren tonterías.
Y es que lo que algunos llaman 'walk of shame',
para mi cabeza es un circo de inspiración inagotable.

He visto a un tendero colgando un cartel
subido a una escalera de madera,
y me he acordado de la mala suerte.

Yo hoy, voy a pasar por debajo de tus escalones.
A dejar cruzar al gato negro por mi puerta,
sólo para observar su grácil caminar,
mirarle a los ojos amarillos y decirle:
¡VADE RETRO, SATANA!
Provocando, como nos gusta, al mal fario.

Voy a caminar con paso firme sobre las rayas de las baldosas,
a saltar cada agujero de alcantarilla,
a tomar la sal de mano ajena
y verterla por delante de mi hombro derecho.

Voy a salir a un escenario vestida de amarillo y gritar:
¡Dios apiádate de mi!
Y Dios se apiada.
(Y no se mueve)

Tentemos a la suerte
a ver a qué quiere jugar ella con nosotros.

Por eso, seguiré follando
y seguiré volviendo a casa sola.
Porque es saludable para esta actividad de creación poética.

martes, 22 de marzo de 2016

PÁJAROS


Voy a subir este poema ahora, aunque tiene unos meses. Alguien me ha recordado que le gusta y me ha dicho las razones. Y me he dado cuenta, de nuevo, de lo importante que es la autenticidad.
Lo acompaño de dos fotos más antiguas todavía, tomadas en Las Tablas de Daimiel. Respecto al título, se explica en este vídeo.



Hoy puedo decir que no me importa nada más.
Hoy he salido a la calle de noche y estaba lloviendo.
He salido a la calle, y me ha encantado mojarme la sonrisa.
He puesto el volumen tan alto,
que ya no me ha importado como de grave sonase esta voz.

He salido a la calle bajo la lluvia
y no me ha importado nada.
Una calada
a un cigarro,
húmedo.
Y una vuelta a la manzana
bailando con las farolas.

Creo que la perra se ha avergonzado de mi.
Pero es que ya me ha dado igual.
¡Qué pueden decir misa si quieren!
Que éste es mi año
y hoy es mi día,
y no quiero volverme a ir a dormir nunca
sin algo nuevo en la cabeza.

Es irónico sin embargo,
pues mirando al cielo,
con las lagrimas,
(golpeándome la cara)
de la lluvia...
he pisado una mierda.
Pero ya, tampoco me ha importado.
Porque hoy,
he podido limpiarme saltando sobre los charcos.






jueves, 17 de marzo de 2016

"Soneto" blanco y cutre al ruido


Entonces el ruido gritó al silencio
que quedó henchido de estupor y sangre.
Con cada sílaba que el camino abre,
deja roto al mutismo sin presagio.

Con cada palabra que porta el aire,
un zumbido, del reposo al bullicio
y el sigilo olvidado, cual rocío
de una flor, una mañana en diciembre.

Se produce una invasión de alaridos,
que ya no callan, ni lo harán jamás,
pues su protesta viste los senderos

de colores que aprender a apreciar;
Que en tus ojos irrumpen sus motivos
y no querrás no volverlos a escuchar.




miércoles, 16 de marzo de 2016

Estaciones en Castilla

Revisando diarios antiguos he encontrado este poema y he decidido rescatarlo y plasmarlo aquí. Lo escribí para presentarlo a los premios Silencio, que organizaban en mi colegio, en los cuales se llevo el primer puesto y yo, un bono de no se cuántos euros en libros, pero muchos, y que fueron para mi como el maná. Esto ocurrió durante mi último año de bachillerato, allá por enero de 2012, cuando ni siquiera había cumplido la mayoría de edad, y sorprendentemente, el poemilla me sigue gustando.



Caminando en tierras castellanas,
el invierno aprieta las carnes
y cubre con su musgo la piedra helada,
que con gusto acoge
su flamante y verde traje.

Pero en el verano estío,
los campos de labranza 
brotan con tiernos girasoles,
que desvían su mirada
hacia llanuras más lejanas,
persiguiendo el oro eterno
cual quimera inalcanzable, 
que se oculta cada noche;
harto de no tener descanso,
ni domingo, ni festejo.

Cielo y tierra
conjugan sus parajes,
antónimos e impares,
en esta maravilla
que es Castilla.

La primavera roza la estepa con su viento
y a lomos de un alazán subida
dejo que el cielo me cubra con su espejo, 
me pongo a pensar y me duermo por dentro. 

De ocre y oliva
se pintan los barbechos, 
de rosa los almendros,
de blanco los cerezos,
y de risas, mis recuerdos.

En otoño se para el tiempo
vuelan las hojas,
 como golondrinas ajetreadas,
que bailando revoltosas,
buscan el silencio de sus vástagos
oculto entre los matojos.

Es el mismo manto de estrellas,
el que cubre cada noche nuestras tierras,
y ufano, 
alegra su rostro,
que muestra en las sombras
todas y cada una de sus perlas.


Lupiana, Guadalajara.


jueves, 10 de marzo de 2016

Pallida mors pulsat aequo pede pauperum tabernas regumque turres


Tu casa es un lugar vacío
de todo aquello que debería hacerlo hogar.

Una sombra,
emerge desde la habitación del fondo del pasillo
e invade el salón en forma de niebla mortecina,
que como un gas lacrimógeno
se inyecta en los pulmones
y te hace llorar,
pero ésta, no se va nunca.

Quizás sea esta la noche
que acabe contigo,
que penetre en tu alma
y anide allí su mácula.

Y cambie tu forma de mirar.
De mirar...

Unos botes de pastillas.
El cuchillo con el que picaste
la última cebolla,
de una nevera vacía.

De mirar...

La bañera, de la que no sale agua caliente
porque pagaste la última factura,
hace ya tres meses.
El carbón de barbacoa,
que sabes que sigue en su mesilla,
en la habitación del fondo del pasillo.
Esa soga que usaste,
en la última obra que hiciste,
hace ya seis meses.

Puede ser que esta noche,
sea la última noche...
Yo siempre lloraré,
por no haber sido capaz nunca,
de decirte 'te quiero'.
Y siempre pensaré que tengo la culpa.

En tu casa vacía,
de todo aquello que la convertiría en hogar.
Espacio okupado,
por lúgubres y lóbregas vanidades.
El dolor diario
y las ganas hacinadas,
de dejarse ir.
Pues hasta eso, conlleva responsabilidades.
Y por eso, hasta hoy,
es una necesidad no consumada.

Hoy puede ser el día
que veas las cosas de otra forma.

Que veas...

La banqueta que usas
para cortarte las uñas de los pies.
El bote de lejía,
con el que limpiaste el baño
por última vez, hace ya tres meses.
Las cuchillas de afeitar,
que se oxidan en la repisa,
sin usar, hace ya dos semanas.

Siento que lleva siendo así mucho tiempo.
Y no se si es peor
que alguna de estas noches,
te parezca mejor idea que hasta ahora,
o que te lleve pareciendo buena idea,
desde hace ya dos años,
pero no hayas tenido el egoísmo
de urdirla nunca.

Y tampoco sé
qué me hace sentir más culpable.

miércoles, 9 de marzo de 2016

8M



DIGNAS. DIVERSAS. INSUMISAS. JUNTAS.



Nebulosa violácea,
marea cárdena en la Ronda de Atocha.
Pleamar de mujeres diversas,
pisando juntas el mismo asfalto,
demandando aquello que les pertenece...
Hoy.
Y mañana.
Y cada día.
Acreedoras de sus palabras,
orgullosas de su seno,
meritorias por su fortaleza,
insumisas ante la urdimbre patriarcal.
Entretejen su trama a cada paso,
hilan su fuerza en cada grito.



Mujeres cis, mujeres trans, mujeres hetero, mujeres homo, mujeres bi...
MUJERES. Unidas.
Libres, fuertes, independientes.


Nebulosa morada

miércoles, 24 de febrero de 2016

Liberación de palabras vacias


Te perdono.








He venido a casa corriendo solo para vomitar aquí esas dos palabras.
Palabras que se me escapaban de boca para luchar por el libre albedrío,
que se supone, iban a conseguir tras la emancipación de cada letra.
La osadía me ha hecho escribirlas como si el hacerlo significase que son reales.
Pero solo tras su excarcelación,
me he dado cuenta de que da igual.
Que no importa una mierda si te perdono,
o si te sigo odiando un tiempo más.
Porque antes tengo
que perdonarme a mi misma.
Y no hay forma de que me perdone
la extrema tolerancia sin cabeza,
la fuerza de voluntad para callar
y todas las veces que me he tragado mis palabras y he puesto

la otra mejilla.

sábado, 20 de febrero de 2016

HASTA EL COÑO (parte 1)

No puedo escuchar más 
audiopoemas de mujeres 
idolatrándoles de esa forma.

Por favor, parad.

Se que no sois conscientes, 
porque está en vuestra cabeza sin quererlo.
Pero si estas palabras ayudan en algo:

No quiero volver a escuchar 
que él era el dueño de vuestras ilusiones, 
que vuestro cuerpo le pertenecía en cada centímetro de piel,
ni que poseía todas y cada una de vuestras palabras.

No quiero escuchar que era perfecto, 
ni que si su bondad...
ni su ternura...
Mucho menos de su protección, 
de su hombría...

POR FAVOR, PARAD.

Los reyes no existen, 
el amor tampoco.
Al menos no ese tipo de amor.


Yo las naranjas las quiero enteras.
Como yo.



Nebulosa morada 



lunes, 15 de febrero de 2016

Enronquecimiento, carraspera o afonía.

Afonía, lo llaman.
Te impide gritar, 
y alzar la voz con fuerza.

Afonía, lo llaman.
Pero se siente como una mano que aprieta contra tu cuello.
Como una mano que ahoga tu grito.
Como una plancha caliente que no te deja respirar.

Me dijeron que callara.
Me dijeron que dejara de hablar.
Afonía, lo llamaban.
Pero yo sabia que de otra cosa se tenia que tratar.
Que mi cuerpo no me castigaría de esa forma.

Pero las palabras no brotaban,
y las ideas, con ellas, se acallaban.
Las ganas se hacían tan pequeñas...
hasta desaparecer.

El silencio te está matando.
El silencio. Asesino disfrazado de conformidad.

Hasta que levantas la cabeza y susurras 'basta' con el último hilo de voz.


Me dijeron que se llamaba afonía.
Estaban equivocados.